Castañeda fusionaría ministerios de Cultura y Agricultura de llegar a la presidencia

Foto: Facebook Jade

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Alcalde de Lima rechazó de manera tajante que comuna pretenda talar árboles de la ciudad. Declaración la dio mientras talaba un árbol de la ciudad, hecho que tranquilizó a periodistas.

Asimismo, anunció que artistas plásticos de la olvidada brocha gorda comenzaron a pintar de color amarillo los murales de la ciudad, expresión cultural que, aseveró, alegró a todos los vecinos incluso a los que no les alegró.

En otro plano de la información, alcalde anunció la cancelación del Festival de Artes Escénicas de Lima, medida que, según dijo, busca impulsar el repunte de la economía doméstica, puesto que limeños ya no gastarán en acudir a ver las obras del festival y contarán con más dinero para gastar en productos golosinarios, entre otros bienes de factura local.

Más adelante, preguntado sobre su futuro político, burgomaestre de 70 años de edad, aseguró que de llegar a la presidencia buscará la eficiencia de gobierno al fusionar ministerios. «Agricultura rima con Cultura. Esas carteras están queriendo fusionarse hace rato y nadie lo ha notado. Es una vergüenza. En consecuencia, esa será mi primera medida de gobierno».

Líderes del partido del alcalde opinaron que reducción de aparato estatal es una necesidad y, en ese sentido, apoyaron a su líder y confiaron en que pueblo peruano sabrá elegir esta opción honesta. «Aunque eventualmente hemos cometido deslices, solo hemos robado en provecho de las generaciones futuras y solo por eso», sentenció joven regidor de 25 años que llegó a conferencia a bordo de una moto Ducati valorizada en medio millón de dólares y que, según aseguró, es fruto de su ahorro durante los primeros 2 meses de desempeño en el cargo.

Líderes históricos del partido amarillo recordaron que alcalde es el último de una generación de tecnócratas cuajados en los duros años de desgobierno de los años ochenta, época en que pocos prohombres de su calidad se quedaban a hacerla en nuestro país, temerosos de la inseguridad. «Si bien se encuentra enfermo y chocho, burgomaestre se encuentra sano y lúcido (sic), salvo que a veces se queda mirando el vacío y cabecea, cual esforzado chofer de combi en su última hora de trabajo», susurró teniente alcaldesa.

«Pero, carajo, quién no cabecea en Lima», añadió alcalde tras ser despertado para que pudiera dar por finalizada conferencia de prensa.